Ay! Esos hombres que viven en el nuestro pasado!
Ay! Esas promesas de amor eterno incumplidas!
Ay! La de veces que nos hemos preguntado "Qué carajo le vi???
Ay! El pasado nos condena...
Hoy recuerdo con una sonrisa las lágrimas vertidas en su momento por cada uno de mis exes (ex novios, ex amantes, ex amigos con derecho, ex amor imposible, ex whatever). Es que en su momento, era importante... en su momento, tenía sentido... en su momento.... estaba cegada por la BOLUDEZ que nos invade cuando andamos enganchados...
Me ha pasado de volver a ver a alguno de mis exes y decirme... Pero por el amor de Jebús! Qué carajo le vi??
Por todo esto, hete aquí que vengo a hacer una recopilación de los diferentes tipos de exes... y cómo actuar ante ellos...
* El ex piola: Se trata de un personaje con el que las cosas terminaron relativamente bien (generalmente, vos terminaste la relación, pero él tampoco tenía muchas ganas de seguir), es una persona a la que no le guardás rencor, con quien ya se habló todo lo que se debía hablar y con el que está "todo bien". Estos son los más peligrosos en el caso de sequía emocional. Puede ocurrir que se crucen en la calle, o que aún lo tengas en el chat o el Facebook, la cosa es que por algún motivo, en algún momento puede ser que te parezca una buena idea volverse a ver o juntarse a tomar algo. NO. No es una buena idea. El ex piola es, ante todo, un ex. Todo bien con que nos crucemos, charlemos y nos riamos juntos -a la distancia- pero cada uno sigue su vida, la relación no va a ser nunca lo que fue. MUY IMPORTANTE: Cuando hay sequía... no llamarlo! Es más, es mejor borrar el número directamente, para no caer en la tentación de sólo recordar los buenos momentos.
* El ex que te gana: Listo, se terminó la relación. Cada uno por su lado. Todo bien. Y así un día, de la nada, sabés de él. Puede ser por alguien que te cuenta, o porque la vida es una perra y te lo pone en frente en la peatonal. Y resulta que su vida cambió totalmente. ¿Antes era un vago? Consiguió un trabajo buenísimo. ¿Se dejaba la barba y olía mal? Te lo cruzas y parece un Adonis que huele a paraíso. ¿No tenía futuro? ¿Sólo quería tocar la guitarra? Tadáaaa, sacó un disco, se hizo un fucking millonario! Encima seguro que el día que te lo cruzás, vos estabas indispuesta, horrible, vestida de entrecasa y con el pelo hecho un nido... y él iba de punta en blanco, más lindo que nunca. Y encima, con la sonrisa más blanca del mundo, te cuenta de que está de novio, o que se casó y tiene una familia hermosa. Y que se ganó el Quini. QUÉ HACER: No creerle todo, puede que le esté yendo bien, pero si te echa todo junto en la cara, es que le picás todavía... Y reírte mucho. Cuando pasa una cosa así, no queda otra que reírte...
* El ex "oh mi dios, por qué?": Es el que cuando te lo cruzás, honestamente dudás de tu capacidad de raciocinio, y querés matar a tu yo del pasado, por haber salido con semejante monstruo. Generalmente cuando te lo cruzás vos estás di vi na, en tu mejor momento... y lo ves al susodicho... y te querés matar, por bichera. QUÉ HACER: Sonreír y seguir tu vida. (No caer en la tentación de intentar ser la ex que le ganó -del punto anterior- No importa lo mal que hayan terminado las cosas, hacer leña del árbol caído es de yegua... y si necesitás mostrarle lo bien que estás, no lo superaste...)
* El ex desconocido: Aquel que fue tu amorcito hace tanto tanto tanto tiempo que de casualidad te acordás de él, recién cuando te dice "soy Pepito, te acordás? Siempre íbamos a tomar cerveza a lo de Menganito". De más está decir que si te olvidaste completamente de él es porque nunca hizo nada ni demasiado bueno, ni demasiado malo... simplemente fue un "relleno". QUÉ HACER: Nada... ni te acordabas el nombre... no cambia tu vida en absolutamente nada.
* El ex hijo de puta: Ese que te duele, que te acordás patente que te cagó con todas las que se le cruzaron, que te cagó plata, que cagó a tus amigos... que se cagó en vos, básicamente. QUÉ HACER: Ver lo viejo, demacrado y feo que pueda llegar a estar. Compararlo con lo divina que estás vos. Y NO HACER UNA ESCENA. No importa lo mucho que lo odies, si hacés una escena, sólo te perjudicás vos misma, porque a él ni le vas, ni le venís. Y vos vas a hervir de la rabia. Laissez faire, Laissez passer, dejar hacer, dejar pasar. Dejar pasar de largo, como si no lo hubieras visto.
* El ex que no fue: Es la cuentita pendiente que te quedó picando. El que no te dio bola. Lamentablemente, salvo contadas excepciones, siempre están más buenos que antes, y te tientan horriblemente. QUÉ HACER: Y... vos fijate... no es cuestión de andar dejando las peleas sin pelear... Yo, una ondita le tiro, a ver si pica...
Ahora... tirar onda y si el otro pica, hacerse la "ay, no" es de histérica. Vos fijate.
* El ex "todo bien": Se terminó y está todo bien. Te lo cruzás y está todo bien, incluso charlan un rato, ambos crecieron, cada uno siguió su vida, le va relativamente bien. No hay broncas, ni nada.... QUÉ HACER: Nada, charlar un rato, si se da, sonreír y seguir con tu vida.
* El ex psicópata: Aquél que no te superó. Que sigue enganchado en el mismo rollo de siempre. Te persigue, te invita a salir de vez en cuando. Mágicamente sabe todo de vos. QUÉ HACER: Huir. Rápido.
Puede que existan otras categorías, pero, la verdad, no se me ocurre ninguna ahora... así que bueh...
Anécdota de un ex:
Yo una muchachita de 15 años... él un par de años mayor (un par de pares... bastante boludón ya)... Oportunamente, nuestro noviazgo había acabado, precisamente porque yo tenía 15 años y no sabía bien qué carajos quería, así que lo adorné con unos cuernos di-vi-nos... y luego le dije "te metí los cuernos" (podrán acusarme de infiel, pero no de mentirosa) seguido de un rotundo "quiero terminar la relación". El muchacho, que debería haberme mandado a la mierda, no sólo no lo hizo, sino que, lloroso, me pidió que no termináramos y que me perdonaba (entre otras cosas que no vienen al caso). Yo calculo que debe haber sido un momento muy de mierda para él, si no, no puedo explicarme su reacción cuando me lo crucé en la calle, muchos años después (7/8 años). La cosa es que iba yo caminando por la peatonal, cuando lo veo, después de tantos años, venir caminando hacia donde me encontraba yo. Yo sonreí, porque iba a saludarlo. Y ahí noto que venía de la mano de una chica (una morocha bastante linda, he de decir) y que al verme, tiró de la mano de la novia (?) de manera de ponerla adelante de él, como diciendo: "Mirá que buena que está!". Y después pasó a mi lado, asintió con la cabeza como saludando, pero sin saludar... y siguió. La verdad, me dio un poco de pena. Pobre chabón... cómo le explico que ya no soy esa pendeja yegua que lo lastimó? Y cómo le digo que no hace falta pasearla a la minita, hacerla desfilar, porque a mi, honestamente, no me importa qué es de su vida?
Má sí... que se curta...
Me pregunto... ¿qué clase de ex seré yo?